Durante los últimos años, los consumidores de redes sociales y la sociedad en general se han inclinado por una propuesta y consumo de contenido más “real”. Los contenidos sobre editados, los filtros extremadamente exagerados y videos o contenidos cuidadosamente pensados han dejado de ser algo llamativo y consumible. El espectador de hoy en día prefiere videos y contenidos que, a priori, se muestran crudos, sin edición ni preparación. Personas auténticas y naturales, lo vemos en muchos aspectos, como, por ejemplo, TikTok y YouTube, donde los creadores de contenido cada vez se muestran más vulnerables y humanos, o en aplicaciones como Locket y BeReal que te invitan a la espontaneidad publicando fotos del ahora, sin filtros y de tu vida. Esta tendencia lleva unos años imponiéndose, y donde antes nos veíamos seducidos por vidas perfectas y felices hoy queremos vernos reflejados en lo bueno y en lo malo, con opiniones atrevidas y conocer a las personas a través de la marca.

Contenido Obsoleto

Lo que hace unos años era motivo de tener millones de vistas, como los cuerpos perfectos, casas de ensueño, y productos que “revolucionan” la vida de las personas ya no son la manera de acercarse a tus clientes. No lograrás una conexión emocional con tus clientes y, por ende, serás una marca y/o producto olvidable, que no recomendarán en el tiempo y que olvidarán fácilmente. Hay que adaptarse a lo de hoy, a lo real, para que tu producto o tu contenido resuene con el cliente y que este no se sienta juzgado o que le están contando una mentira.

El valor de lo real y la comunicación honesta

El marketing ha tenido que adaptarse a la comunicación honesta y a esta tendencia de “realidad” donde las personas ya prefieren un marketing honesto a resultados del tipo “inmaculado”, buscando construir relación marca-consumidor. Esta realidad es algo que muchas personas y agencias ya tienen en cuenta al momento de aplicar estrategias de marketing. Este marketing más honesto permite que las empresas destaquen entre un mercado saturado y competitivo, con unos consumidores cansados de ser engañados y de afirmaciones que dejan mucho que desear. Se buscan marcas más auténticas y transparentes en la comunicación.

La autenticidad como clave del éxito

La evolución del marketing y la comunicación digital ha sido notable en los últimos años. Anteriormente, las marcas buscaban proyectar una imagen idealizada de sí mismas, mostrando solo los aspectos más positivos y glamorosos de sus productos o servicios. Sin embargo, este enfoque ha perdido su efectividad en la era actual, donde la transparencia y la autenticidad son valoradas por encima de todo.

Enfocar nuestros productos, servicios y contenidos a esto es lo que lograra que seamos marcas más relevantes para una nueva generación de consumidores

Humanizando las marcas

Una de las tendencias más destacadas en este nuevo paradigma es la humanización de las marcas. Los consumidores ya no quieren interactuar con entidades impersonales; prefieren establecer conexiones emocionales con empresas que se comporten de manera genuina y cercana. Esto implica que las marcas deben adoptar una voz auténtica en sus comunicaciones, mostrando empatía, humor y vulnerabilidad cuando sea apropiado.

Humanizar una marca implica mucho más que simplemente crear una imagen amigable o utilizar un lenguaje informal en las comunicaciones. Se trata de infundir autenticidad en cada aspecto de la interacción con el cliente. Desde la forma en que se presenta el producto hasta la manera en que se manejan las quejas y los comentarios en las redes sociales, cada punto de contacto con el cliente ofrece una oportunidad para humanizar la marca.

El poder de la vulnerabilidad

La vulnerabilidad se ha convertido en una herramienta poderosa para construir relaciones sólidas con los consumidores. Cuando una marca se muestra vulnerable, admitiendo sus errores o compartiendo sus desafíos, crea un puente de empatía con su audiencia. Este acto de sinceridad no solo humaniza a la marca, sino que también genera un sentido de confianza y lealtad por parte de los consumidores.

En un mundo donde la perfección está tan idealizada, la vulnerabilidad se destaca como una cualidad valiosa y poderosa. Las marcas que se atreven a ser vulnerables no solo rompen barreras con su audiencia, sino que también abren la puerta a una comunicación más auténtica y significativa. En última instancia, la vulnerabilidad se convierte en una fuerza impulsora que fortalece la conexión entre una marca y sus seguidores, permitiendo relaciones más auténticas y duraderas.

La importancia del storytelling

En este contexto, el storytelling se ha vuelto más relevante que nunca. Contar historias auténticas y conmovedoras sobre la marca, sus fundadores o sus empleados, permite que los consumidores se identifiquen y se involucren emocionalmente. Estas narrativas genuinas no solo captan la atención de la audiencia, sino que también refuerzan la imagen positiva y auténtica de la marca.

Donde podemos usar esta estrategia como método de conexión emocional con las historias y con las personas que estás interesadas en nosotros, donde por el simple hecho de que puedan sentirse identificados con nosotros, nuestra marca y nuestros ideales, logrará que la persona se fidelice completamente con nuestra marca y conecte de manera emocional, más allá de lo racional.

Podemos afirmar que la era del contenido superficial ha llegado a su fin. Las marcas que deseen destacarse en el mercado actual deben abrazar la autenticidad como principio fundamental de su estrategia de marketing. Al adoptar una comunicación honesta, humanizada y emocionalmente resonante, las empresas pueden construir relaciones duraderas con sus consumidores y diferenciarse en un mercado cada vez más competitivo.